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40 allanamientos en Rosario por Esteban Alvarado
La División de Inteligencia de la Policía de Investigaciones de Rosario ejecutó este jueves una serie de allanamientos por causas que involucran al reconocido capo narco Esteban Lindor Alvarado, quien actualmente se encuentra preso en el penal de Ezeiza y bajo régimen de aislamiento.
En total se realizaron 43 procedimientos tanto en Rosario como en localidades cercanas: San Lorenzo, Soldini, Pérez, Roldán, Granadero Baigorria y Capitán Bermúdez. A esto se le suman operativos que tuvieron lugar en la vecina provincia de Córdoba, donde se probaron vínculos con la red de delitos de Alvarado.
Durante los allanamientos se detuvo a cinco personas, que quedaron a disposición de la Justicia sospechadas de integrar una estructura de lavado de dinero liderada por el jefe narco. Además, se secuestraron armas, 140.000 dólares en efectivo y $7.000.000. Natalio Marciani, director de la PDI, aclaró que los detenidos son “todos de Rosario”.
Entre ellos está Gustavo Armando Cárdenas, condenado por dirigir una banda narco e involucrado en varias investigaciones por homicidio, entre ellas la de Roberto del Valle Padilla Echagüe, alias Tuerto Boli y quien mandaba en Empalme Graneros hasta su ejecución, ocurrida en diciembre del 2012.
La causa que desencadenó los operativos tuvo que ver con el robo de vehículos de alta gama, que luego eran introducidos al mercado automotor para su reventa. Según Marciani, algunos de los robos “eran por encargo” y varios autos habían sido robaros en Córdoba. “Una vez que empapelaban, los metían en el mercado legal”, explicó el funcionario.
Con esto, Alvarado sumó una nueva causa, luego de haber sido condenado en 2022 por instigar el homicidio de un prestamista y por asociación ilícita. Además, se le adjudicó la carga de un transporte con drogas hallado en la provincia de Río Negro. Por todo esto, cumple la pena de prisión perpetua en el penal de Ezeiza.
Además, luego de un intento fallido de fuga, el narco recibió un endurecimiento de sus condiciones de reclusión y recientemente se encuentra bajo un estricto régimen de aislamiento, por el que sólo se puede comunicar con su abogado defensor, mientras se investiga su posible participación en los crímenes de cuatro trabajadores durante una ola de violencia en la ciudad durante marzo.
En esta línea, cabe recordar que durante la audiencia imputativa de uno de los acusados, se reveló que un gatillero recibió una videollamada desde Ezeiza, en la que se le explicaba que debía cometer el crimen que terminó con la vida del playero Bruno Bussanich.
