Ya los ánimos de los mesadineristas están bastante crispados, y no decir del de los banqueros. El próximo lunes, entonces, batallarán los de La Libertad Avanza y los del PJ-K por imponer su interpretación del resultado de las urnas bonaerenses. Mientras tanto, habrá que ver cómo acogen los resultados los inversores.
Al decir de un importante gestor internacional, todavía con algunas posiciones en activos argentinos, los grandes ya hicieron su primavera, se han ganado casi 90% promedio desde el año pasado, ya se fueron y la miran de afuera, y si bien saben, como el resto del mercado que, si todo sale bien, sin que ello signifique parafrasear al Presidente con su “TMAP”, Argentina tiene potencial, hay mucho “upside”, pero ello vendrá después del retorno a los mercados de capitales internacionales y cuando las reformas estructurales dejen de ser un mero deseo.
Hasta ese momento, puede haber una que otra “ganga” por ahí, pero asumiendo una alta dosis de riesgo. Esta apatía también se vio ya en las últimas reuniones y encuentros antes de los comicios bonaerenses. Incluso, llamó mucho la atención que, en una tradicional mesa mensual de uno de los principales referentes económicos de la city, ya no se refirió al mandato de Milei, como el “primero” como venía haciéndolo desde el año pasado, deslizando así que ahora ya no estaba descontada la reelección de Milei. Es más, para los distraídos, el gurú enfatizó este detalle en medio de su “racconto” de la coyuntura.
Lo que un importante empresario industrial sacó en limpio de los encuentros en los que participó fue que el panorama se complicó y cambió lo que podía esperarse de LLA en los próximos dos años.